En los mapas que vamos a ver debajo podemos observar como ha ido cambiando el mapa de España por Comunidades en cuanto al problema de la obesidad en aumento, analizando los datos desde 1987 a 2020. Son preocupantes y conocidos.
Incluso en este siglo XXI vemos que algunas pocas zonas de España han mejorado como el ejemplo de que algo se puede y se debe hacer. La mayoría han empeorado tanto en hombres como en mujeres.
Sabemos sin duda que todas las enfermedades, todas, tienen peores pronósticos si el paciente está obeso. Además también sabemos que algunas de las enfermedades básica se dan más en personas obesas. Incluso también, ya no solo enfermedades sino trastornos que restan calidad de vida, o accidentes que se convierten a la larga en serios problemas de movilidad y de calidad de vida.
Generalmente además, estar obeso nos cuesta mucho dinero. No siempre, es cierto, pero muchas veces sí. Y en cambio comer mejor y hacer ejercicio que serían los dos pilares básicos, pueden no costarnos dinero.
Hoy podemos comprar comida de cualquier tipo sin salir de casa. Abrimos una pantalla y se nos ofrece a la vista cualquir restaurante, plato, comida extranjera o no, vicio o similar. Es muy sencillo terminar en la obesidad. Nunca ha sido tan sencillo.
Además sabemos que cada vez somos más sedentarios, tenemos más estrés emocional, más soledad, menos y peor descanso, y nos alimentamos peor y más. Todo se une, todo lo contrario de lo que debería ser Salud.
No vivimos mucho más que un romano de hace 2.000 años. Es curioso esto. En Grecia de hace 2.000 ó 3.000 años se vivía de media unos 35 años, pero porque si se enfermaba de algo grave no había solución y se morían y afectaba a la media de edad.
Pero Platón murió con 80 años. Tito Livio murió a los 76 años y Galileo a los 77. Kant murió a los 79 años de edad. No son ejemplos representativos, pero hay que entender que hay pocos datos y que no había ni Sanidad, ni químicos, ni quirófanos.
En el año 2023 se cree que el 37,8% de los españoles sufren sobrepeso y el 22% obesidad. Pero se sabe que estas cifras están muy por encima pues es complicado analizarlo bien, ya que muchas personas no acuden a sus médicos de Familia.
Para el año 2035 se calcula que más de la mitad de la población mundial vivirá con sobrepeso (y gran parte del resto sufrirá hambre) y uno de cada cuatro tendrá obesidad si no mejoran las medidas actuales de prevención y tratamiento.
No solo se trata de comer menos y de hacer más ejercicio. También influyen otros aspectos genéticos, de estrés, de calidad de vida, de problemas de salud, de edad. Por eso es fundamental tratar este problema desde niños.
Actualmente se calcula que el exceso de grasa afecta a cuatro de cada 10 niños, y a tres de cada 10 adolescentes, según el último dato disponible para España del estudio Alimentación, Actividad física, Desarrollo Infantil y Obesidad (Aladino).
La obesidad nos trae problemas de salud física pero también mental, de autoestima. Nos lleva a una muerte adelantada, a reducir nuestra esperanza de vida, a poder trabajar peor y tener menos productividad, a rendir menos en las escuelas, a perder calidad de vida y aumentar las discapacidades, a tener unos elevados costes sanitarios que se podrían dedicar a otros menesteres como la investigación.
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